En las escenas iniciales, James Bond obtiene el código 00 después de matar al jefe corrupto de MI6, Dryden, y a su aliado Fisher en Praga. Mientras tanto, en Uganda, Mr. White ha organizado un encuentro entre el banquero Le Chiffre y el guerrillero Obano, quien solamente quiere proteger sus fondos monetarios; si bien Le Chiffre le asegura a éste que «no hay peligro alguno en la cartera de inversiones», en realidad sus inversiones son de bastante riesgo, ya que realiza ventas cortas de empresas para después financiar atentados terroristas contra las mismas en un intento por hundir sus acciones y comprarlas a precios más bajos.

Como parte de su primera misión como el agente 007, Bond persigue al terrorista Mollaka en Madagascar; tras una persecución parkour que finaliza en la embajada de Nambutu (un lugar ficticio),[6] Allí, Bond mata a su objetivo. Para escapar del lugar hace estallar una parte del edificio. Segundos después, al hacerse con el celular de Mollaka, descubre que Mollaka había recibido un mensaje SMS de Alex Dimitrios, un asociado de Le Chiffre en Las Bahamas. Con esta información, viaja a ese lugar y vence a Dimitrios en un juego de póquer obteniendo así el Aston Martin DBS del mismo. Con el fin de conocer los planes de Dimitrios, Bond seduce a su esposa, Solange, quien le revela que su esposo habría de partir a Miami esa noche para cumplir con algunos negocios. En ese instante, parte rumbo a Miami para asesinar a Dimitrios y frustrar el plan de Le Chiffre consistente en destruir el prototipo Skyfleet Airliner. Como consecuencia de lo anterior, el banquero queda con una pérdida financiera cuantiosa, ya que previamente había hecho ventas cortas de opciones put en las acciones de Skyfleet, las cuales habrían expirado para entonces sin valor alguno.

Notablemente presionado por recuperar cuanto antes el dinero de su clientela, Le Chiffre se ve en la necesidad de instituir un torneo de póquer de altas apuestas en el Casino Royale, ubicado en Montenegro. Confiados en que, ante un eventual fracaso, el banquero se vería obligado a buscar protección del gobierno británico para salvaguardar su integridad de los furiosos acreedores, MI6 procede a inscribir a Bond en el torneo del Casino Royale. Al llegar ahí, el 007 se reúne con su contacto René Mathis y con la agente del HM Treasury Vesper Lynd. Esta última tiene que vigilar que el presupuesto gubernamental para mantener activo a Bond a lo largo del torneo no sobrepase el tope estipulado. Al principio, Le Chiffre hace creer a Bond que está de farol, provocando el fallo de Bond tras haberlo arriesgado económicamente todo. Calificándolo como una apuesta imprudente, Vesper rehúsa continuar financiándolo con los fondos del gobierno. Angustiado, el 007 decide asesinar a Le Chiffre en el casino, pero antes es interceptado por Felix Leiter, un agente de la Agencia Central de Inteligencia que había estado jugando también en el torneo de póquer, quien le ofrece sustento económico para que pueda continuar en el juego. A cambio, le pide que Le Chiffre sea su recluso una vez que acabe el torneo. Así, una vez de vuelta en el desafío, Bond es envenenado por el banquero y sufre un colapso ante un inminente ataque cardíaco. No obstante, Vesper llega a tiempo para salvarle la vida y reanimarlo.

Finalmente, Bond triunfa y se lleva los fondos acumulados hasta ese momento. Para celebrar su victoria, Bond y Vesper cenan juntos esa noche, pero poco después es secuestrada por Le Chiffre, quien la usa como señuelo para que Bond los siga. El agente 007 acude al rescate de Vesper pero sufre un accidente automovilístico tras una persecución y queda inconsciente. Es así como Le Chiffre logra secuestrarlo también a él con el propósito de hacerle revelar la contraseña con la cual acceder a los fondos del torneo de póquer; para ello recurre a la tortura física, amenazándolo incluso con castrarlo si rehúsa cooperar. Sin embargo, un renuente Bond jamás termina por compartirle tal información confidencial puesto que Mr. White entra repentinamente al mismo cuarto y ejecuta a Le Chiffre y a todos sus allegados bajo la consigna de no haber recuperado el dinero perdido. Misteriosamente, Bond y Vesper son dejados con vida.

En plena recuperación de sus heridas, Bond despierta al día siguiente en un hospital de Lago de Como. Ahí ordena el arresto de Mathis, quien considera que es un doble agente. Asimismo, decide revelarle a Vesper que está enamorado de ella, mencionando que su rol como el agente 007 le ha llevado a «perder su humanidad». Como consecuencia de ello, decide enviarle su renuncia a M y pasar unas vacaciones junto a Vesper en Venecia. No obstante, Bond se entera luego de que los fondos del torneo de póquer nunca se llegaron a depositar en la cuenta del HM Treasury, por lo que comprende que Vesper los ha robado. Así, decide seguirla hasta llegar a un edificio en remodelación, donde ella se encuentra con unos sujetos sospechosos que la interceptan y toman el maletín que llevaba en ese momento, y en cuyo interior se encuentra el dinero desaparecido. Con tal de adentrarse en el edificio, Bond le dispara a unos dispositivos de flotación que sostienen los cimientos, impidiendo la inundación de la estructura. Esto provoca que el edificio comience a colapsar en el Gran Canal. Una vez que asesina a los susodichos, Bond se percata de que Vesper está aprisionada en un ascensor, con riesgo de quedar atrapada bajo el agua. Aunque intenta rescatarla, ella se disculpa con lágrimas en los ojos por lo sucedido y arroja las llaves de la puerta hacia las profundidades, desechando cualquier posibilidad de salvarse. Para cuando Bond logra abrir la puerta y salir del edificio ahora hundido, Vesper ha muerto. Mirando la trágica escena desde un balcón aledaño, Mr. White toma el portafolio con el dinero y se marcha del lugar.

Poco después, M le revela a un todavía conmocionado Bond que Vesper tenía un novio franco-argelino que había sido secuestrado por la organización detrás de Le Chiffre y White. De esta forma, se sobreentiende que Vesper había aceptado darles el dinero de la apuesta ganada en Casino Royale con la sola condición de que no mataran a Bond. Con esta información, y percatándose de que Vesper tenía el número telefónico de White en su celular, decide ir en búsqueda del villano. En las escenas finales, se aprecia a White llegando a un palacio cerca de Lago de Como y recibiendo una llamada telefónica; al preguntar por la identidad del interlocutor, recibe un disparo en la pierna. Finalmente Bond lo alcanza, cargando un silenciador UMP en su mano, y recita: «Me llamo Bond. James Bond».

Fuente: WikiPedia ES